EL PODER DE LA FE

Dios nos asombra cada día, solo tenemos que despertar nuestros sentidos espirituales para poder captar aquello que el Padre hace por nosotros. Cuando mi fe estaba resquebrajada porque no encontraba respuestas a mis interrogantes, cuando me decía a mi mismo que había perdido la esperanza la respuesta del Señor llega cual rayo que traspasa toda barrera de inceredulidad en mi vida, sin embargo tengo que seguir la lucha, la vida cristiana es un largo camino de fe, pero el viaje se torna mas liviano cuando tenemos claro hacia donde vamos, lo peor que le puede pasar al cristiano es perder el rumbo, perder su norte, su meta; y cuantos me pregunto, van por la vida sin norte, sin destino, sin Dios...

"Te haré entender y te enseñaré el camino por donde debes andar, sobre tí fijaré mis ojos (Salmo 32:8)", "puestos los ojos en Jesús, el autor y consumador de la fe (Hebreos 12:2)", "porque por fe andamos, no por vista (2da. Cor. 5:7)". Si la vida cristiana es un camino de fe y esa fe proviene de Cristo, el hecho es vivir en fe, en la certeza de que recibiremos lo que esperamos según la voluntad del Señor, la certeza de que Dios permitirá aquello que será lo mejor para nosotros; tiempos de duda e incredulidad pueden venir, lo peligroso es que esa duda o incredulidad se convierta en nuestro patrón de vida, así que cuando vengan esos momentos la respuesta es buscar al Señor con mas ahinco, adorarle sin cuestionarle, pues Dios se agrada en quienes así le buscan...

Escuché que Dios tiene tres respuestas a lo que le pedimos, "si", "no" y "espera"... bueno Señor, yo esperaré en ti.